No hay que practicar ningún tipo de laboreo ni roturar la tierra,. La siega de la hierba se transforma en humus que se reincorpora a la tierra para enriquecerla con materia orgánica y protegerla. a modo de acolchado. Trabajar en exceso la tierra daña le sistema radicular de los árboles y destruye los microorganismos que viven en simbiosis con las raices. El humus es el que la enriquece y en sus interacciones con las raices proliferan hongos y bacterias que mejoran la absorción de los nutrientes. La tierra no se toca, es esta vida microbiana la que trabaja, protegida y alimentada permanentemente por diferentes aportes orgánicos en superficie.
La materia orgánica es la base de la fertilidad. Los seres vivos "hacen" las tierras y las tierras ayudan al desarrolo de los seres vivos. El tiempo de la reconciliación entre el ser humano y la Naturaleza tan sólo se puede alcanzar si se adopta una practica agrícola sana y sin pesticidas químicos. Éstos ya han hecho sus lamentables demostraciones y no nos aportarán ninguna solución para el futuro, sean cuales sean sus nuevas formulaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario